martes, 9 de septiembre de 2014

SUEÑO DE UNA NOCHE DE VERANO.

      No suelo contar mis sueños, pero la otra noche, tuve uno, realmente muy.... curioso, o confuso, o especial... bueno, en realidad no sé cómo describirlo.
     El caso es que era un día soleado, acababa de coger el coche para ir a comer con mi madre que vive en un pueblo cercano, a unos 16 km del mio. Cuando voy conduciendo, a veces, me aburro de escuchar música y suelo aprovechar para hacer alguna llamada (no está bien, lo sé, pero a veces lo hago, como fingir que escucho a la gente cuando están diciendo cosas que me aburren tremendamente o sacarme mocos,sí, eso también lo hago a veces.) En fín, el caso es que pensé en llamar a un amigo con el que hacía tiempo que no hablaba. Iba a ser la típica llamada normal, que hace una amiga a un amigo, a media mañana de un domingo. Si no fuera porque ese amigo resultaba ser, también, mi "bien odiado" ex. Una cosa no quita la otra, es amigo, y es ex, y es"bien odiado". Podría hacer cualquier otra definición de él, pero esta es, sin duda, la más acertada.
      ¿Creeis en las casualidades? Yo cada día más. El caso es que al descolgar el teléfono y saludarnos me dice que está en la carretera, pasando muy muy, pero que muy cerca del pueblo de mi madre de camino al norte del país. 
     No me lo podía creer, pero como era consciente de que era un sueño, me encogí de hombros y le pregunté si iban a parar a comer por ahí. En un principio, él y sus amigos (iba con dos compañeros de trabajo) habían pensado hacer la parada para comer un poco más tarde, pero al recibir mi llamada, y justo en el momento en el que pasaban por allí...cambiaron de plan. Lo que son los sueños, ¿verdad? ¿cómo podemos soñar con esas casualidades?
     Redirigí mi rumbo y me dispuse a ir a comer con ellos, con mis pantalones cortos raídos de domingo (los más cómodos del mundo) unas sandalias verdes y una camiseta naranja (conjuntadísima y marcando estilo).
     Menos mal que hasta en sueños soy muy limpia e iba recién duchadita y oliendo a avena kinesia y a desodorante... 
      El resto del sueño fue una montaña rusa de sensaciones en las que mis nervios no estaban a la altura de las circunstancias y mi coordinación entre cerebro, corazón (y palabras) era completamente inexistente... pero cómo ya he dicho antes.... menos mal que era un sueño.Y ya se sabe... Los sueños, sueños son!

No hay comentarios:

Publicar un comentario