lunes, 15 de febrero de 2021

HISTORIAS DE AMOR

       Ayer fue el día de San Valentín, se celebra el amor de pareja. El de hijos, hermanos, padres y amigos no es oficial, pero es amor al fin y al cabo. Por supuesto facebook me recordó las entradas que había hecho yo años anteriores tal día como este y como estaba aburridísima estudiando me puse a bichear un poco las publicaciones y eso me llevó a recordar algunas de ellas.

      Las he tenido de todos los tipos, formas y colores: solitarias, con celebración, sin celebración, celebrando el amor, maldiciéndolo...Pero hubo dos que destacaron, una por mala y otra por buena. Podría decirse que fueron mi peor y mi mejor San Valentín.  Si fuera más cínica diría que es trampa porque son dos años bastante recientes, como excusa diré que sí, es cierto, pero es que las más antiguas fueron o muy empalagosas por la estupidez juvenil o muy desastrosas por la soltería incipiente del momento. Sea como fuere me quedo con estas.

     Mi peor San Valentín fue hace ya unos cuantos años, no recuerdo exactamente cuantos, pero más de cinco seguro. Yo andaba en pareja y era un sábado. El viernes había quedado con mis amigas y él con sus amigos, por lo que ese sábado de amor estábamos resacosos. Fui a comer con mi madre y después a casa a prepararme, me vestí con ropa muy sexi, preparé cena, unos bombones para tener un detallito... y no se presenta. Cuando consigo hablar con él me dice que bebió mucho el día anterior y que si quiero que puedo ir yo a su casa... si me pilla ahora! En aquel momento lo encajé de una manera muy neutral, total tampoco era la primera vez que pasaba, aunque no es San Valentín, pero como él era de esos que piensan que es una tontería, pues claro. Es algo completamente frugal, no tiene gran importancia, lo peor fue el sentimiento de estupidez por no ver lo que significaba, tanto que dejó poso.

    Mi mejor San Valentín fue 2018. Un día de mierda. Era entre semana y  teníamos pensado ir a cenar a un italiano. Yo le había comprado un detallito, nada espectacular pero me hacía mucha ilusión. A media tarde me llamó una gran amiga, pidiéndome ayuda. Su hermano estaba mal, y necesitaba que yo fuera a buscarlo y lo llevara a la estación de tren para mandarlo a casa de ella y así poder enderezarle un poco. No daba señales de vida, no cogía el teléfono, no contestaba a los mensajes y cuando llegamos a su casa, que estaba en un pueblo bastante lejos, no abría la puerta. Fui a buscar las llaves a casa de su abuelo con una excusa absurda, pero daba igual. Cuando entré la estampa era tremenda, conseguí que cogiera algo de ropa, un par de cosas para el viaje y a Atocha, el viaje fue una hora más o menos, pero me parecieron tres. Al llegar a la estación le compramos el billete, le dimos algo de cenar y conseguimos que subiera al tren. Yo no tenía todas conmigo de que al final lo hiciera.  Los motivos por los que yo lo hice están claros, daba igual el dinero del billete, de la cena que le pagamos, la gasolina, daba igual su aspecto, el olor, la horrible sensación de ver una persona  que tanto conoces destrozada por las drogas... Les quiero mucho, tanto a él como a su hermana. Pero mi pareja, no tenía ningún motivo para todo esto, o podríamos decir que tenía el mismo que yo. El amor, pero a mí.

     Si alguna vez pienso en qué significa el amor, o cómo se puede demostrar que quieres a alguien, solo tengo que acordarme de estos dos días concretos de San Valentín.

viernes, 5 de febrero de 2021

NOLITE IUDICARE...

      Mi propósito más recurrente de todos los 1 de enero (y prácticamente de todos los días) es no juzgar. Lo llevo mal, hoy la entrada iba a tratar de otro tema pero releyendo la  de ayer he cambiado de opinión. Ya nada más empezar llamaba gilipollas a todos esos seres humanos que echan la culpa de todos los males a otro, como hacen el 99% de las personas, incluso yo a veces. Es normal aunque no deja de estar equivocado y es que claro, ¿cómo es posible que no se den cuenta de su error? lo están haciendo mal! así no se hace!, así no se vive!

   Me resulta dificilísimo, incluso muchas veces se genera en mí un sentimiento violento muy fuerte cuando veo a alguien hacer daño a un animal, a un niño, cuando veo una mujer siendo maltratada, menospreciada, cuando se aprovechan de ella y esta no reacciona, o incluso cuando lo está pasando mal en una relación porque no le dan lo que ella quiere y no lo deja.  Escribiendo esta entrada borro y reescribo veinte veces las frases porque las expresiones son juicios casi siempre. Soy consciente que hasta haciendo eso, muchas siguen estando.

    Es muy complicado, pero lo intento todos los días. Hay veces que frente a una situación determinada no sé muy bien cómo actuar sin juzgar y otras veces ni siquiera me doy cuenta de que estoy juzgando hasta después. Creo que es eso que dicen todos los sabios de "deja fluir" y si algo no te gusta te vas, pero no lo juzgues. 

    ¿Esto es bueno o es malo? ¿Lo he hecho bien o mal? ¿Debería hacer más o menos? ¿Debería ir o quedarme? En el fondo creo que lo único que quiero es que todos hagan lo mejor para mi conveniencia, ¿eso es juzgar? Que todo sea de la forma que a mí me haga sentir bien o que yo pueda comprender...Incluso cuando la consecuencia de un acto que a mi me parece "malo" no es la que yo espero... también me frustro y al final la que siempre está amargada soy yo...

    O quizá no, quizá es que me estoy juzgando ahora mismo y soy demasiado dura... Qué difícil!!!!!!

jueves, 4 de febrero de 2021

LA CULPA FUE DEL 2020...

 ... A tomar por culo el 2020... Adios 2020... Qué mal año ha sido el 2020...!!!! Cómo me estoy riendo ahora de todos esos gilipollas que se pasaron una semana diciendo que toda la culpa era del "año" y que ahora que cambiábamos a 2021 todo iría mejor. Si es que no aprendemos. Yo no tengo ni idea de por qué está pasando todo lo que llevamos viviendo ya casi 12 meses, pero creo firmemente que todo pasa por algo. Que es como una especie de advertencia, una llamada de atención y no sabemos sobre qué. Supongo que uno a uno iremos aprendiendo la lección que nos están queriendo enseñar y entonces podremos pasar de nivel. 

   La muerte es una putada, eso es así, pero es que todos vamos a morir, todos, del primero al último. La pena es hacerlo cuando aún te quedan muchas cosas por vivir y tienes ganas de vivirlas. No me malinterpretéis, a mí también me duel que se muera la gente, pero es que es ley de vida y parece que cada muerte es una tragedia ilógica que no llegamos a comprender... y para mí, tragedias son los accidentes que no tenían que suceder pero la inconsciencia humana los provoca, los asesinatos, las enfermedades en niños que apenas han disfrutado de la vida... ya sabéis.

   Yo no espero nada del 2021, lo único que quiero es que se reduzca la estupidez humana, que parece ser que con la edad en muchos casos no mejora... y que yo aprenda lo que tengo que aprender y pueda seguir adelante sin volver a caer en los mismos errores.