jueves, 15 de enero de 2015

ACUARELA

     Cuando tenía seis años mi abuela me regaló una caja de lápices de colores y me dijo:
- "Pinta el mundo de los colores que tu quieras que sea".
     Y yo, que siempre he sido muy princesita para estas cosas lo pinté todo de color rosa, azul, verde, naranja, amarillo, violeta... todos ellos colores claros como movidos por el viento.
    Pero hay días que aparecen los grises, los negros, los rojos oscuros, los azules tan oscuros que parecen la noche más profunda. La vida no siempre es lo que creemos. Los seres humanos a veces pintamos de colores feos el mundo.
     Vivir en un mundo en el que la maldad no existe es imposible. Personas que dañan, hieren a los demás por el simple hecho de verles sufrir, ni siquiera sé si obtienen placer en hacerlo o no se dan ni cuenta. Podría enumerar un millón de hechos que harían que se le helara la sangre en las venas a cualquiera, ocurridos esta misma mañana. Las personas somos así.
Pero sigue habiendo gente, por suerte, que esta mañana estaba leyendo un ejemplar de "la historia interminable" en la orilla del mar, y se acuerdan de ti. Te envían una foto para que veas que el mundo sigue siendo precioso. Y a pesar de las palizas, las enfermedades, los abandonos, los trabajos basura, los jefes explotadores, los engaños, los compañeros pesados,las mentiras, los atascos agobiantes, las cifras negativas en el banco a final de mes, los cuernos, las ausencias, los colores feos y fríos, los días vacíos, las miradas rechazadas, la desesperación, la desesperanza, la orfandad, la muerte, las lágrimas...
    A pesar de todas estas cosas, todos los días sale el sol y me niego a pensar que hay que dejar que los días pasen, tacharlos del calendario sin más, dedicarnos a sobrevivir, a respirar y caminar... he aprendido a no pensar en las cosas que yo no puedo controlar,¡Bien! no puedo arreglar el mundo yo sola, pero eso no significa que no vaya a seguir intentándolo. O por lo menos intentaré hacer sonreír a los que están a mi lado y que sean un poquito más felices. Porque como dice un hada de los bosques que vive en mi chimenea: "Aún nos queda la música, los libros,los besos, el chocolate, el vodka y los orgasmos"!

No hay comentarios:

Publicar un comentario